Octubre Amarillo: Una versión esotérica del caso Barreda
Nadie sabe por qué las mató. Todos hablan y dicen, pero la verdad es que nadie sabe. Ni el juez, la policía menos. Yo sí, y lo supe desde siempre. Ya lo había soñado. Muchas veces, creo que desde que vine a La Plata, hace como veinticinco años. Yo soy de Bragado, ¿conoce Bragado? Linda ciudad, antes no me gustaba, ahora sí. Mi padre trabajaba en la acería, era perfilador en la planta de matrices. Este es él, éstos son los compañeros de sección, éste de traje es Bernardo Coll, el dueño, un personaje en Bragado, y atrás está el horno eléctrico, cuando lo inauguraron. Es la única foto en serio que tengo de mi padre, en las demás está siempre con mi madre. Parece otra persona. Mi madre siempre decía lo mismo: “El hombre y la mujer nunca pueden reírse de lo mismo”. Ella todavía vive. Yo me vine a La Plata para estudiar, pero después dejé. La verdad es que me vine para escapar de ellos. No eran malos, pero eran el pueblo, eran Bragado. Mi madre más que mi padre, pero es lo que pasa siempre. Las madres son capaces de todo.
Capítulo completo acá (Octubre Amarillo, editada en 1994 por Almagesto, fue escrita antes de que se iniciara el juicio al Sr. Barreda y publicada en Página 12. Una serie de inexplicables similitudes entre datos surgidos del proceso legal real y esta nouvelle llevaron a la defensa, a la fiscalía y al juez a citar a Báñez para que diera cuenta del modo en que había obtenido los datos en cuestión. La perplejidad compartida con las partes implicadas fue la única prueba que Báñez pudo aportar hasta la fecha para demostrar que nunca, jamás, había tenido trato con el odontólogo. Ni siquiera le había arreglado una emplomadura. Y sin embargo ... . Juzgue ud. mismo este relato de intrigas cuyos capítulos restantes, haciendo honor a las reglas del género, aparecerán más o menos semanalmente en este blog)
8 Comments:
Me gustó mucho eso de que el hombre y la mujer nunca pueden reirse de lo mismo. Tenía el libro pero lo preste y no me acordaba se consigue todavia?
Lo editó Almagesto. Gracias.
Quise ingresar un comentario en el texto anterior y no pude.
Fue una sorpresa encontrarlo aquí. Bien el cambio de título; el empeño está puesto en ver lo que no puede verse.
Vos sos un motor de la fe
Lo esencial es la visibilidad. Pero a veces pistoneo. Abrazo.
Más que esencial, es lo recomendable; pero a veces no se puede. Por eso debe ser que pistoneás.
Sí, sí, pistoneo en baja.
Ay, ay, ay
¿ Y los capítulos restantes prometidos ?
Pasofacturas
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