Sea-Monkeys
Una de
boxeadores
y de
nostalgia
política
(A Pancho Muñoz)
No debe de existir nada más tierno que el box: los boxeadores suben al ring para que no los lastimen. Es lo que no saben quienes ignoran tanto las reglas de este deporte como el origen de sus púgiles. Seguir leyendo acá.
No debe de existir nada más tierno que el box: los boxeadores suben al ring para que no los lastimen. Es lo que no saben quienes ignoran tanto las reglas de este deporte como el origen de sus púgiles. Seguir leyendo acá.
posted by Gabriel Báñez at 12:14 p. m.
17 Comments:
Muy bueno Gabriel, y sumamente emotivo, saludos y el abrazo desde el páramo.
NUNCA SE SABE LO QUE UNO ESTÁ CRIANDO, ME ENCANTO EL CUENTO POR LA TERNURA. UN BESO.
Qué buena nota. Un abrazo.
Alvaro, el abrazo a vos desde el llano. Te estoy leyendo.
Bárbara, gracias, nunca se sabe. Tan cierto.
Hola, querido Gustavo. Un abrazo arquitectónico, te leo seguido.
Qué buen post! Me gustó mucho el recorrido.
Alguna vez tuve uno de esos bichos, aunque no recuerdo sus finales; me imagino que mis padres se desharían de ellos entre sueños.
A mi, para no comprarme los sea monkeys, me juntaron unos bichos renacuajoides tan inútiles como los originales del interior de un tanque australiano. De ahí mi desconfianza con el subgenero político y otros zooplasmas
Luisa, gracias, entre sueños líquidos.
Ignatius, todo es una conjura contra los necios. El abrazo primario.
especies de menguelesboys con plasmas partidarios. criarlos o tirarlos a la zanja antes de abrir el sobre.
saludos.
especies de menguelesboys con plasmas partidarios. criarlos o tirarlos a la zanja antes de abrir el sobre.
saludos.
Mengueles boys, qué te voy a contar que no sepas. Tal cual, tiro el sobre y abrazo no partidario.
Fantástico y, perdóname, tan cortazariano, tan increíble y creíble a la vez, tan despertador de sueños y ensueños. Un abrazo, maestro.
no se si parece a algo, a mi no se hace parecido a nada. Eso es lo bueno, no? Y los padres dejan huella, además de un saludo final de sea monkey, sea como sea. Esa es la historia. Saludos al maestro
Hola, Francisco. Gracias, siempre gracias. Te estoy leyendo, abrazo y la invariable amistad.
Andrés, la mosca es necesaria. Los machos sensibles también. Te mando el abrazo, gracias por tu visita sea monkey.
Cómo he disfrutado tu texto, Gabriel, es excelente. Crónica, historia, experiencias, relato, todo un goce.
Yo también tuve el sobrecito de los Sea-Monkeys y de allí jamás nació nada que no fuese expectativa y decepción. Fracaso que aún era demasiado niño para ahogar en Peñaflor en el deporte y no tenía tío que me llevase a ver a Acavallo, Locche ni Perón (quise decir Monzón). Tardé dos semanas y varias lecturas en comentar este texto sugerente y polisémico, abierto, que cada vez me dice otras cosas. Mérito excelente, sin dudas. Un abrazo.
Magda, gracias. Siempre por aquí y mi valoración por tus palabras.
Cinzcéu: Peñaflor es todo un hallazgo, era zurdo me parece, pero el pesaje lo excedía. Te leo y la amistad (el texto es polirubro, creo).
Cinzcéu, caro amigo y en confianza: de los sobrecitos míos tampoco nunca salió nada.
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